- entrada publicada originalmente el 5 de mayo de 2022 -
Hola! :) varias personas que nunca usaron me han preguntado qué onda alojarse con Airbnb, así que les cuento un poquito de mi experiencia. La verdad es que yo uso muchísimo la app, y hasta ahora nunca tuve una MALA experiencia, pero sí tuve tres experiencias que no volvería a repetir, se las cuento:
Estas primeras dos que voy a contar fueron de un viaje que hicimos con Jona por Europa, y que para reducir gastos alquilamos habitaciones dentro de las casas de otras personas. Sin dudas esto no es para todo el mundo, pero te sale muchísimo más barato, y si estás de paso, como nosotros, es tremenda opción. Peeeero, no todo es perfecto, y hay cosas que son evitables (pero no lo sabíamos) 😅
1) En una casa en Suiza habíamos alquilado una habitación por una sola noche. Era en un pueblo divino en las montañas, donde he mostrado fotos que fue el festival de globos aerostáticos. La llegada al airbnb era desde las 3 de la tarde, pero cuando nos preguntaron a qué hora llegábamos, como estábamos paseando por otros lados y sin internet en la ruta, le dijimos que calculábamos que como a las 6. Al final llegamos una hora antes de lo previsto, y Jona se bajó del auto para avisarle a la dueña del airbnb. Cuando abrió la puerta, salió muchísimo humo de adentro del apartamento y la dueña se sorprendió. Estaba fumándose uno con amigos, pero al ver a Jona lo abrazó muy feliz y nos recibió igual 😛 A la mañana siguiente, yo me entré a bañar y a los pocos minutos me toca Jona la puerta diciendo que la dueña había olvidado algo en el baño y se tenía que ir a trabajar, así que le terminé diciendo que pase. mientras rogaba que la cortina no se transparentara. Es una experiencia sin dudas para el recuerdo, pero hoy en día creo que ya no estoy para eso 😕
2) El segundo inconveniente también pudo haber sido evitado teniendo internet, pero como no teníamos… Era un alojamiento en la Selva Negra en Alemania, también era solamente una noche ya que descansábamos ahí para seguir haciendo ruta. Le avisamos a la dueña que íbamos a llegar en la madrugada, y nos mandó las indicaciones de dónde quedaba la llave escondida. Pero no nos dijo cuál apartamento era 😖, y nos dimos cuenta recién cuando llegamos. Entramos al hall del edificio, pero había varios pisos con más de un apto cada uno, y en ningún lado decía qué piso o apartamento era. No sabíamos qué hacer, era invierno y hacía mucho frío. Obviamente no queríamos despertar a los vecinos equivocados, pero necesitábamos poder entrar (además de que ya estaba pago). Volvimos a mirar las fotos que estaban en la app a ver si nos dábamos cuenta la altura por las ventanas, pero no. Le dije a Jona que empezara a probar la llave en todas las puertas, pero nos daba miedo que pensaran que éramos ladrones. Después de mucho rato tuvimos que hacer eso, pero probamos en todas las puertas, gracias a Dios nadie se despertó, pero ninguna abría 😒 Al final terminamos activando el roaming en el celular y llamando a la dueña, quien se despertó y muy tranqui nos dijo “ah, es que la puerta no abre fácil, hay que cincharla y luego pasar la llave”. Se hubiera evitado todo tan fácil :) De esto obviamente no tengo foto.
3) Esta última experiencia nos enseñó a leer y averiguar TODO antes de reservar un alojamiento. Obviamente nosotros pensábamos que habíamos leído todo, pero siempre hay que prestar atención a la mínima cosa, y más cuando está en otro idioma 😅 Igual después de esta experiencia no nos vuelve a pasar algo así ni de casualidad. Igual debo admitir que de esta historia me enteré meses después de que pasó, porque Jona no nos quiso contar para no arruinar el viaje Reservamos un alojamiento hermoso en Grindelwald, Suiza. Fue un viaje que hicimos también con mis padres y mi tía. El apartamento tenía vistas a una de las montañas más conocidas en Suiza, era una belleza realmente. Habíamos conseguido un buen precio, ya que la zona es normalmente muy exclusiva. Los días en ese apto fueron de lo más lindo del viaje, salíamos a caminar, mirábamos la montaña de día y de noche 🗻 Lo habíamos reservado unos meses antes del viaje, y ya estaba pago. Unos días antes de llegar nos mandaron un mail indicándonos la dirección para pasar a retirar la llave y “pagar las toallas”. Cuando Jona llegó al lugar a retirar, le dijeron que el pago por el uso de las toallas (que ya estaban en el alojamiento) se hacía en efectivo. Dijo que no había problema, y le entregaron la factura… eran 300 francos suizos (más o menos 300 dólares!) por el uso de las toallas esos días Ahora que ya pasó nos sirve como anécdota, pero obviamente en el momento fue un shock… Bueno, para él, para mí fue un shock cuando me enteré meses después y casi me muero! Las duchas más caras de mi vida sin dudas, pero de esto aprendimos y mucho 🚿
Vos usás Airbnb? tuviste alguna mala experiencia? Te leo :)
Mientras termino de escribir esto estoy en el aeropuerto esperando mi vuelo, ya les contaré de este próximo destino ✈
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